Bolivia: cuatro claves para entender la crisis social y política
- miguelerazope
- 1 dic 2019
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Desde la búsqueda de una nueva reelección de Evo Morales hasta las alternativas de solución ante la mayor crisis política en Bolivia de los últimos años
Conoce el paso a paso de la ola de protestas en Bolivia, un hecho que se dio inicio con la cuarta candidatura de Morales que fue acompañado de una serie de ciudadanos y políticos
Evo Morales - Conflicto Político
Tras 13 años y 9 meses en el poder, Morales dio un paso al costado del gobierno boliviano, luego de una ola de protestas en su contra por la denuncia de la oposición, así como de la Organización de Estados Americanos (OEA), debido a irregularidades durante su elección.
Como si fuera poco al descontento ciudadano se sumaron las Fuerzas Armadas y la Policía, quienes tras tres semanas de olas de protestas y bajo el pronunciamiento del alto mando de las Fuerzas Armadas bolivianas, general Williams Kaliman, pidieron la renuncia de Morales al mandato presidencial en busca de una pacificación del país andino.
Sin lugar a duda, también fue la re-re-reelección de Morales la que ante tan premeditada situación hizo que los líderes sociales y políticos, como Luis Fernando Camacho, presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, pidieran la dimisión de no solo el presidente, sino de toda su gobierno, que incluye senadores y diputados; así como magistrados del Tribunal Supremo de Justicia y el Tribunal Constitucional.
Jeanine Añez, segunda vicepresidenta del Senado es hoy la nueva presidenta interina de Bolivia
La abogada de 52 años y vicepresidenta del Senado, Jeanine Añez, se proclamó presidenta transitoria de Bolivia, tras la renuncia de Evo Morales por fraude electoral luego de 14 años en el poder y de ser uno de los políticos más poderoso de ese país.
Jeanine asumió la presidencia del país y fue validada por el Tribunal Constitucional, pues el Vicepresidente, la presidente del Senado y la primera Vicepresidenta abandonaron sus cargos.
Biblia, religión en la política de Bolivia
Cuanto Evo Morales decretó en el 2009 que Bolivia se convierta en un Estado laico, se olvidó de algo importante: la animadversión de un sector conservador y religioso. Hoy, 10 años más tarde, es esa oposición conformada por colectivos de derecha que agrupa desde empresarios hasta un sector religioso importante, los que provocaron su caída y asilo.
La biblia jugó un papel importante en la crisis que vivió Bolivia. Precisamente fue Fernando Camacho, el líder de la rebelión contra Evo Morales quien enarboló durante semanas el texto cristiano como bandera de lucha contra el cuestionado exmandatario boliviano.
“No estoy yendo con armas, voy con mi fe y mi esperanza, con una Biblia en la mano derecha y su carta de renuncia en mi mano izquierda” fue una de las promesas que exclamó Camacho frente a miles de manifestantes y opositores al gobierno de Morales.
Camacho cumplió su promesa, y tras el escándalo del fraude electoral, ingresó al Palacio Quemado con una biblia, un rosario y una carta de pedido de renuncia a Evo Morales. Colocó la bandera boliviana y se arrodilló frente a ella.
Pero las invocaciones no solo están alrededor de Camacho. En paralelo, las Fuerzas Armadas y la Policía exhibiendo una cruz y un rosario pedirían también al mandatario aymara que deje su cargo. Acorralado y argumentando que no quería que corra sangre, el primer presidente indígena del país vecino renunció.
Por su si fuera poco, Jeanine Añez, la senadora de derecha que se proclamó presidenta interina de Bolivia, exhibió orgullosa no una, sino dos biblias al estrenarse en el cargo, prueba de la pujanza de los cristianos en el escenario político boliviano.
Alternativas ante la crisis
Nuevas elecciones libres y transición democrática
Entre las posibilidades para superar la crisis política de Bolivia, tras la renuncia de Evo Morales a la presidencia debido a la presión de los militares y un sector de la ciudadanía estas son las opciones que se proponen:
En el ámbito internacional, el pleno del Parlamento Europeo (PE), el último 28 de
noviembre aprobó una resolución señalando que para que vuelva la estabilidad de Bolivia es necesaria la celebración de nuevas elecciones “libres, inclusivas y transparentes” en el más breve plazo. Es más, los europarlamentarios se ofrecen como observadores de cara al nuevo proceso electoral de Bolivia.
Por su parte, el ex presidente boliviano Álvaro García Linera, asilado en México
recientemente dijo que en su país no puede haber elecciones si antes no se restituyen las garantías democráticas.
Mientras tanto, la presidenta Jeanine Añez, junto a la presidenta del Senado, Eva Copa, el 24 de noviembre promulgó la ley para convocar nuevas elecciones generales.
Asimismo, la Asamblea Legislativa de Bolivia, acaba de aprobar el reglamento y la convocatoria para la selección de los nuevos miembros del Tribunal Supremo Electoral (TSE), como paso previo que permita una salida a la crisis política desatada el pasado 20 de octubre.
No obstante, La Paz aún no define la fecha de las próximas elecciones. Se espera la activa participación de la comunidad internacional para garantizar la transición democrática y evitar que la crisis política siga dividiendo al país del altiplano y sus más de 11 millones de habitantes.
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